miércoles, 21 de octubre de 2015

Francisco de Goya en Miércoles de Artistas



Francisco de Goya y Lucientes (Fuendetodos, provincia de Zaragoza, 30 de marzo de 1746-Burdeos, Francia, 16 de abril de 1828) fue un pintor y grabador español. Su obra abarca la pintura de caballete y mural, el grabado y el dibujo. En todas estas facetas desarrolló un estilo que inaugura el Romanticismo. El arte goyesco supone, asimismo, el comienzo de la pintura contemporánea, y se considera precursor de las vanguardias pictóricas del siglo XX.

Tras un lento aprendizaje en su tierra natal, en el ámbito estilístico del barroco tardío y las estampas devotas, viaja a Italia en 1770, donde traba contacto con el incipiente neoclasicismo, que adopta cuando marcha a Madrid a mediados de esa década, junto con un pintoresquismo costumbrista rococó derivado de su nuevo trabajo como pintor de cartones para los tapices de la manufactura real de Santa Bárbara. El magisterio en esta actividad y en otras relacionadas con la pintura de corte lo imponía Mengs, y el pintor español más reputado era Francisco Bayeu, que fue cuñado de Goya.

Una grave enfermedad que le aqueja en 1793 le lleva a acercarse a una pintura más creativa y original, que expresa temáticas menos amables que los modelos que había pintado para la decoración de los palacios reales. Una serie de cuadritos en hojalata, a los que él mismo denomina de capricho e invención, inician la fase madura de la obra del artista y la transición hacia la estética romántica.

Además, su obra refleja el convulso periodo histórico en que vive, particularmente la Guerra de la Independencia, de la que la serie de estampas de Los desastres de la guerra es casi un reportaje moderno de las atrocidades cometidas y componen una visión exenta de heroísmo donde las víctimas son siempre los individuos de cualquier clase y condición.

Gran popularidad tiene su Maja desnuda, en parte favorecida por la polémica generada en torno a la identidad de la bella retratada. De comienzos del siglo XIX datan también otros retratos que emprenden el camino hacia el nuevo arte burgués. Al final del conflicto hispano-francés pinta dos grandes cuadros a propósito de los sucesos del levantamiento del dos de mayo de 1808, que sientan un precedente tanto estético como temático para el cuadro de historia, que no solo comenta sucesos próximos a la realidad que vive el artista, sino que alcanza un mensaje universal.


miércoles, 14 de octubre de 2015

Victor Cunsolo en Miércoles de Artistas

Víctor Cunsolo nace en Vittoria, Provincia de Siracusa, Sicilia, Italia, el 2 de abril de 1898. Su padre es armero y fabricante de cuchillos. En 1913, Cunsolo llega al país con 15 años y se instala con su familia en el barrio de Barracas. En 1918 ingresa en la Academia de Pintura de la Sociedad Unione e Benevolenza. En 1921, Juan del Prete, amigo del artista, lo vincula a la agrupación El Bermellón que funciona en una vieja casona del barrio de La Boca. Entre los artistas que la integran se encuentran el mismo Del Prete, Víctor Pissarro, Juan A. Chiozza, Adolfo Montero, Juan Giordano, Roberto Pallas Pensado, Orlando Stagnaro, José Luis Menghi, Salvador Calí, Adolfo Guastavino, Guillermo Bottaro, José Parodi -descendiente de Francisco Parodi-, Pedro César Zerbino, Mario Cecconi, y Guillermo Facio Hebequer.
En 1924 Cunsolo expone en el salón de la Mutualidad de Estudiantes de La Boca. Su primera muestra individual se organiza en La Peña y data de 1927. En 1928 es invitado a exponer en Asociación Amigos del Arte por el artista y animador cultural Alfredo Guttero. Sobre las obras expuestas José León Pagano señala que:
"[...] el pintor hace del oficio un instrumento expresivo". Inicialmente ligado a la impronta impresionista, su obra se va concentrando en la simplificación de las formas, síntesis colorística y en la construcción de atmósferas particulares como se observan en las obras de la Metafísica italiana de De Chirico o Carrà, aportando una visión sugestiva y melancólica de la ribera boquense."
También en 1928 participa en una exposición de pintores argentinos en Costa Rica y, en 1931, realiza su segunda exposición individual en Amigos del Arte. En 1933 integra la exposición colectiva Mostra de Pittura Argentina, realizada en la Galleria di Roma; en el Castello Sforzesco (Milán) y en Carlo Felice (Génova). Ese mismo año recibe el Primer Premio del Salón Municipal. Participa de los salones nacionales entre 1927 y 1931 y entre 1933 y 1935.
Pinta, además de sus clásicas vistas de La Boca, naturalezas muertas y paisajes del interior de La Rioja, sobre todo de Chilecito, donde reside por razones de salud. En 1936, regresa a Buenos Aires con la intención de retornar a aquella provincia en breve, pero muere en Lanús el 10 de abril de 1937.
Ese mismo año, el Ateneo Popular de La Boca y Amigos del Arte organizan exposiciones en su homenaje. En 1969 algunos de sus trabajos participan de la muestra Panorama de la Pintura Argentina organizada por la Fundación Lorenzutti y, entre octubre y noviembre del año siguiente, la galería Feldman presenta una exposición homenaje. En 1985 el Museo Eduardo Sívori realiza una amplia muestra de su obra.
Sus pinturas integran el patrimonio del Museo Nacional de Bellas Artes y el Museo de Artes Plásticas "Eduardo Sívori" de Buenos Aires, el Museo Provincial de Bellas Artes de La Plata, entre otras instituciones.




martes, 6 de octubre de 2015

Tarsila do Amaral en Miercoles de Artistas

Tarsila do Amaral (Capivari, 1 de septiembre de 1886 - São Paulo, 17 de enero de 1973) fue una pintora brasileña. Sus padres eran Lydia Dias de Aguiar y José do Amaral Stanislaus. 
La artista plástica paulista es la pintora más representativa de la primera fase del movimiento modernista brasileño. Su cuadro Abaporu, de 1928, inaugura el Movimiento Antropofágico en los artistas plásticos del país.
Comenzó a aprender pintura en 1917, con Pedro Alexandrino. Más tarde, estudió con George Fischer Elphons. En 1920, viajó a París y frecuentó la Académie Julien, donde recibió la orientación de Émile Renard. En Francia, conoce a Fernand Léger y participa del Salón Oficial de los Artistas Franceses de 1922, desarrollando técnicas influenciadas por el cubismo. De vuelta a Brasil el mismo año, se une a Anita Malfatti, Menotti del Picchia, Mário de Andrade y Oswald de Andrade, formando el llamado Grupo de los Cinco, que defiende las ideas de la Semana de Arte Moderno y se coloca al frente del movimiento modernista en el país.

Se casa con Oswald de Andrade en 1926 y, el mismo año, realiza su primera exposición individual, en la Galería Percier, en París. A partir de entonces, sus obras adquieren fuertes características primitivistas y nativistas. Es característico de esta época su cuadro Abaporu, que sirvió de inspiración al movimiento antropofágico, pudiendo considerarse incluso el primer manifiesto antropófago.

En 1933, pasa a desarrollar una pintura más conectada a temas sociales, de la cual son ejemplos las telas Obreros y Segunda Clase. Expone en las dos primeras Bienales de São Paulo y gana una retrospectiva en el Museo de Arte Moderno de São Paulo (MAM) en 1960. Se le dedica una sala especial en la Bienal de São Paulo de 1963 y, el año siguiente, se presenta en la 32.ª Bienal de Venecia.